La salud mental después de un diagnóstico de cáncer de mama

Para las mujeres (y algunos hombres), saber que tienen cáncer de mama es devastador. Vivir con el diagnóstico puede cambiar el mundo de una persona y, junto con los síntomas físicos, no es raro experimentar problemas de salud mental como depresión y ansiedad.

En el artículo de hoy, exploraremos por qué es vital priorizar la salud mental y la salud física de las personas con un diagnóstico de cáncer de mama.

Prestar atención a los síntomas de la salud mental

Estudios han demostrado una necesidad real de apoyar la salud mental de las personas diagnosticadas con cáncer de mama. Después del diagnóstico y comienzo del tratamiento puede aparecer un torbellino de miedo, tristeza, ira y preocupación. Estas emociones pueden provocar ansiedad y depresión o exacerbar los síntomas de alguien que ya vive con esas condiciones.

Adicionalmente, cuando no nos sentimos bien, tendemos a descuidar nuestra salud física. Es posible que no comamos bien o que optemos por la opción más accesible en lugar de la más saludable. También que no hagamos ejercicio porque estamos muy agotados y, a menudo, tenemos problemas para dormir bien por la noche. No es diferente para aquellas que están en tratamiento por cáncer de mama.

Junto con el costo emocional que puede traer un diagnóstico de cáncer de mama, el tratamiento en sí puede causar insomnio, problemas de memoria y cambios en el nivel hormonal que provocan cambios de humor. El aumento de peso también es un efecto secundario conocido de algunos medicamentos. Todo esto pone a las personas en mayor riesgo de desarrollar problemas de salud mental a largo plazo. Es fundamental conocer estos síntomas y buscar tratamiento de salud mental antes de que empeoren. En algunos casos, los problemas de salud mental duran más allá del tratamiento y se convierten en un trastorno de estrés postraumático (TEPT).

Buscar apoyo para la salud mental después de un diagnóstico de cáncer de mama

Es importante ayudar a las personas a darse cuenta de que no hay vergüenza en buscar ayuda, sin importar las circunstancias. El objetivo principal del tratamiento de salud mental durante el cáncer de mama es ayudar a las personas a aprender a afrontar los cambios emocionales, físicos y emocionales asociados con la enfermedad y los tratamientos, que pueden ser traumáticos y dolorosos.

Hablar con un profesional de la salud mental puede ayudar a los pacientes a sobrellevar la situación durante el tratamiento y la recuperación. También existen otras opciones, como la terapia de grupo, que permite a los pacientes recibir apoyo de otras personas que están pasando o han pasado por experiencias similares. Los grupos suelen estar dirigidos por profesionales de la salud mental con experiencia en el tratamiento de pacientes con cáncer de mama. Para muchas personas, una combinación de tratamiento individual y grupal funciona mejor.

También se ha demostrado que la terapia de realidad virtual ayuda con los síntomas de salud mental del cáncer de mama y algunos de los síntomas físicos. Por ejemplo, los pacientes que sufrieron sofocos y sudores nocturnos mostraron una disminución del 50 por ciento en esos eventos después de usar la realidad virtual en un entorno de terapia.

Encontrar la opción de tratamiento adecuada

Hay varias opciones disponibles para quienes buscan apoyo de salud mental mientras se someten a tratamiento o se recuperan del cáncer de mama. Los hospitales o centros médicos suelen tener trabajadores sociales, terapeutas o psicólogos que tienen experiencia en el trabajo con pacientes con cáncer. Si no hay especialistas en salud mental en el lugar, muchos centros de tratamiento brindarán recursos o remisiones a proveedores externos a pedido.

Otro tratamiento eficaz para los efectos del cáncer de mama en la salud mental es la terapia de realidad virtual. Amelia Virtual Care ofrece entornos virtuales para ayudar con los problemas de ansiedad, depresión y manejo del dolor que experimentan los pacientes con cáncer.

También existen entornos de procedimientos médicos para las personas con fobias o ansiedad acerca de los tratamientos médicos y entornos de relajación para ayudar a lidiar con el estrés que va de la mano con un diagnóstico de cáncer. Los ambientes son totalmente inmersivos y permiten al profesional de la salud mental el control de los parámetros.

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